Con la convicción de lo cotidiano
pero buscando lo que ya se ha ido,
elevo este canto que es casi un grito,
de lo profundo de mi propio canto.
Canto porque mi tosco canto mude
buscando la luz, sabiéndose oscuro,
canto a mi espada que es también escudo,
que me esconde pero tal vez me acuse.
Canto a un sendero con sangre regado,
por un viajero que elude la suerte
pero que en verso sigue caminando.
Canto a la música de mi pasado,
sobre todo canto porque la muerte
que en suerte me toque llegue cantando.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Volvió!!!! Se lo extraña Gatonegro!!!! Encima no hay forma de dejarle un mensaje que no sea por este medio.
ResponderEliminarCantemos entonces, por su regreso a los sonetos!!!
Saludos!
Hola...
ResponderEliminarA mi cruz con este posteo, TU CANTO ME QUIERE CRUSIFICAR...
Muy lindo.!
Besos
Gracias Cecilia. Como siempre gracias.Voy a tratar de ser mas prolijo. ¡Veremos! Pero sigo leyéndote...
ResponderEliminarDeja vu. También gracias. Intuyo lo que quisiste decir y creo que lo comparto.
Un abrazo,